La queratina, la misma proteína que está en la piel y en el cabello, está presente en las uñas debido a que la producen las células vivas de los dedos que la van empujando hasta los extremos hasta que salen pero de forma endurecida.
Sin embargo, hay factores que hacen que terminen quebrándose o debilitándose tales como algunas enfermedades, la edad y hasta el medio ambiente.
Pero gracias a los métodos naturales y a algunos consejos podremos contrarrestar estos efectos negativos. Mirá cuáles son:
Hay que beber mucha agua
Para que tu cuerpo esté hidratado es indispensable ingerir las cantidades necesarias que requiere de agua, pues estos ayudará a que incluso las cutículas de tus uñas estén más hidratadas, así como la piel, el cabello y tus uñas.
Alimentación balanceada
También debes procurar tener una alimentación balanceada en la que puedas comer suficientes proteínas para mejorar la apariencia y salud de tus uñas.
No pulas tus uñas
Debes tener en cuenta que la parte más gruesa de tus uñas es la más saludable del dedo, por eso si las pules para rebajarlas y buscar equilibrio estarían acabando con la parte más saludable y fuerte. Si lo que querés es que tengan menos espesor, trata de lograrlo a través del uso de un buen esmalte.
Remojalas en aceite
Para mantener tus uñas hidratadas podés utilizar una combinación incluso de varios aceites esenciales como el de coco, argán e inclusive el de oliva, que podrías mezclar con la vitamina E o con árbol de té que ayuda a mantenerlas libres de hongos y limpias.
Solo debes empapar una mota de algodón y aplicarlo sobre las uñas y se hidratarán de inmediato. No obstante, tené cuidado de remojar durante mucho tiempo las uñas en agua, porque tiende a debilitarlas haciendo más fácil que se pelen o se doblen.
Tratá de no emplearla en movimientos bruscos
Al crecer la uña la parte que sobresale es la más sensible, por eso lo recomendable es que no se use a manera de herramienta con fuerza porque terminarán partidas.