Siempre intenta mostrarse feliz ante las cámaras. De hecho, la sonrisa de Pampita (40) la caracteriza. En más de una oportunidad, la modelo comentó que no es "falsa". Le sale sonreír, pase lo que pase. ¡Es una pesona feliz! No le gusta el conflicto. Mucho menos, cuando toma estado público.
Si bien Carolina es una mujer muy tranquila, todo puede cambiar en cuestión de segundos si se meten con sus tesoros más preciados. Para sorpresa de todos, reflexionó sobre su personalidad y se reconoció como una persona vengativa.
"Si te metés con mis hijos, no perdono", aclaró en Pampita Online ante el panel y los invitados.
¡Con los chicos, no!