Una de las partes más hermosas del cuerpo femenino son los senos. Como cualquier otra zona del cuerpo, la piel de los senos también necesita cuidados especiales como exfoliaciones para renovarlos y facilitar la absorción de cremas hidratantes y nutritivas.
La piel del pecho es mucho más delicada que la del rostro. Para conservarla en perfecto estado es conveniente hidratarla cada día y nutrirla con una mascarilla una vez por semana.
Es importante cuidarlos para evitar que con el tiempo y ciertas costumbres se caigan y la piel pierda su firmeza:
- Consumir alimentos ricos en antioxidantes y vitamina E.
- Es fundamental conservar el peso, ya que de esta manera la piel se mantendrá elástica y el músculo no estará flácido.
- Es vital que hidratarse constantemente, bebiendo por lo menos 2 litros de agua natural. El té y café no entran como parte del consumo de líquidos necesarios para el organismo.
- La buena postura es fundamental para que el busto se mantenga firme y bello, por eso es importante conservar la espalda siempre recta.
- Realizar regularmente actividades físicas como el levantamiento moderado de pesas, pilates y natación.
- Cuando se vaya a tomar sol es importante aplicar diariamente bloqueador solar porque la piel del busto es sumamente sensible.
- Dormir en una posición en la que no se comprima el busto, la mejor es de costado.
- Tonificar el busto con duchas de agua fría, evitando el agua caliente que debilita los tejidos de esta zona del cuerpo.
- Seleccionar un brasier adecuado a la forma del cuerpo y el tipo de actividad que se realiza. Es importante recordar que la letra se refiere al tamaño de los senos y el número al de la espalda.
- Planear y aplicar los exámenes de mama con un ginecólogo. Las mujeres mayores de 40 años deben hacer una mamografía anual.