Llevar el cabello corto, lejos de resultar masculino, aporta un toque de sensualidad a las mujeres. Cada vez son más las que encuentran su look ideal llevando un pixie, dejando atrás las largas melenas.
Lo mejor es que no hay una sola forma de llevar el cabello corto. Una de las opciones más cool es un corte en escala. Para conseguirlo, el profesional irá degradando el cabello con máquina pasando, por ejemplo, del 1 al 3 mientras hace pequeños saltos que resultan evidentes pero no excesivos. Al ser un corte femenino dejará la parte superior más larga para peinarlo con un toque de volumen.
Otra alternativa es dejar un lateral largo, a la altura de la mejilla e incluso de la barbilla, y el otro rapado prácticamente al uno. La parte de atrás irá también rapada. Tener un lateral largo permitirá peinarlo de diferentes formas, dándole un toque de volumen con unas ondas despeinadas o un efecto extra liso.
Un corte práctico es el boyish. La cera en polvo será perfecta para darle un toque despeinado y natural en el día a día, mientras que la gomina completará con un efecto mojado los outfits de noche. En este caso mantener el largo de forma regular por toda la cabeza, multiplicará las opciones permitiendo marcar un pequeño flequillo lateral.
La cantante Pink es una de las grandes abanderadas del corte pixie. La artista lleva la parte superior extra larga y la parte de atrás y los laterales rapados. Este corte le permite combinar diferentes peinados, haciendo foco en la parte superior, o dejando caer el cabello a los lados.
Cualquiera de estos estilos puede resaltarse añadiendo color al cabello. Un solo tono, combinar varios o pintar mechones. Una de las opciones preferidas para ello es el color del año, el ultravioleta y sus distintas tonalidades.