Silvia Freire, reconocida especialista en desarrollo personal y constelaciones familiares, acaba de completar una gira única que recorrió desde Ushuaia hasta La Quiaca, combinando turismo, aprendizaje emocional y encuentros humanos inolvidables.
Entre paisajes argentinos y experiencias en Europa, Freire transformó su dolor personal en un viaje de resiliencia y conexión, mostrando cómo cada lugar y cada persona puede enseñarnos sobre la vida, la fortaleza interior y la sabiduría ancestral.
En esta entrevista exclusiva con este portal, la experta compartió sus vivencias, consejos para viajar con propósito y cómo convertir cada experiencia en crecimiento personal.
- Bueno, Silvia, ¿cómo estás? Bienvenida de nuevo.
Silvia Freire - Gracias, gracias. Me encanta verte, estar acá.
- Contanos, venís ahora de la gira con el motorhome. ¿Cómo fue esa experiencia?
SF- Fue aventura y experiencia a la vez. Habíamos recorrido Argentina parcialmente antes de irnos seis meses a Europa, así que ahora queríamos completar el norte. Desde Ushuaia a La Quiaca, pasando por Villa La Angostura, Bariloche, Mendoza… recorrimos todo.
Mi consejo: el viaje es un hábito. Subirse a un bus de turista, sentirse turista, activa sustancias que te hacen sentir de paseo, en visita, de fiesta. Realmente hace bien. Salí para curarme después de perder al amor de mi vida y puedo corroborar que funciona.
“El viaje transforma el dolor en aprendizaje”
- ¿Qué te llevaste de esta gira, Silvia?
SF- Mano a mano con la gente. Pensé que daría charlas, pero la verdadera experiencia estaba afuera. Mostrar lo que estaba viviendo fue clave. En Europa, por ejemplo, vi resiliencia en Montenegro, Albania y Kosovo, países que atravesaron guerras recientes.
Personas con una tristeza profunda y sonrisas enormes. Eso me impactó: la capacidad humana de combinar felicidad y tristeza, de seguir de pie pese al dolor.
- ¿Cuándo comenzaste esta gira tras tu pérdida?
SF- Apenas un mes después. Me mudé de departamento, porque asociaba recuerdos con dolor. Los neurocientíficos dicen que imaginar es igual que vivirlo; por eso no te conectés con lo malo, buscá distracciones, nuevos paisajes, nuevos hábitos.
Compré la motorhome y salí, sin mirar atrás.
Impacto humano y cultural: de Europa al norte argentino
- ¿Qué fue lo que más te impactó en estos viajes?
SF- La resiliencia humana. Mujeres con hijos pequeños, esposos muertos en guerra, sonriendo y siendo hospitalarias. Eso me enseñó que el dolor se puede transformar en cariño, enseñanza y vida.
En Argentina, el norte me mostró la riqueza ancestral, la sabiduría de los pueblos originarios y la capacidad de adaptación frente a la colonización y los cambios históricos. Conocí menonitas, aborígenes, y aprendí sobre cooperación, resiliencia y resignación inteligente.
SILVIA FREIRE.“El viaje me enseñó que el dolor se puede transformar en aprendizaje, que la resiliencia es universal y que conectarnos con la humanidad del otro nos hace más fuertes”
Turismo, constelaciones y aprendizaje emocional
- ¿Cómo conectás esto con tu trabajo personal y tus programas?
SF- Todo está vinculado. “Mundo Freire, Turismo Ancestral” es sobre lo que hay debajo de la piel, la herencia emocional, los vínculos y la resiliencia.
Constelamos todo el tiempo: cada mirada, cada encuentro, nos conecta con nuestro pasado y nos invita a estar presentes.

En mi canal de YouTube, Silvia Freire Oficial, muestro estas experiencias cada sábado y lunes a las 22 horas.
Próximos pasos: viajes, espiritualidad y ciudadanía
- ¿Qué viene después de la gira argentina?
SF- Madrid en octubre, luego Grecia con un tour espiritual para argentinos, y finalmente Italia para tramitar la ciudadanía. Mi objetivo no es quedarme en un lugar, sino seguir viajando y aprendiendo mientras el cuerpo lo permita.
Video y edición:
Fernando Halperín