Las várices son venas dilatadas que al inflamarse se hacen muy visibles en la superficie de la piel y pueden convertirse en un complejo que impide que muchas mujeres muestren plenamente sus piernas.
Afortunadamente existen alternativas naturales para ocultarlas. La clave está en disfrazar su color azul o verdoso. En el mercado cosmético existen productos de maquillaje corporal especiales que son ideales para ello y lo más importante es usar uno que vaya con el tono de piel, que no manche la ropa y que sea resistente al agua. Lo mejor de estos productos es que también permiten mantener la piel brillante e hidratada, no tienen efectos secundarios ni la resecan.
Otra alternativa para disimular las várices es realizar un bronceado artificial que permite difuminar las várices con un tono más oscuro del que tiene la piel. La gran ventaja del bronceado artificial es que todo el cuerpo lucirá el mismo color y la desventaja es que por lo general estos tratamientos son costosos y ameritan retoques cada cierto tiempo.
También se puede hacer una crema de maquillaje corporal casera. Para ello se debe agregar a la crema hidratante de uso regular un polvo bronceado que vaya bien con el tono de la piel. Mezclar bien los ingredientes y aplicar en las piernas para disimular las várices.
El uso de medias de comprensión sigue siendo recomendado porque ayudan a disminuir la inflamación de las venas, mejorar la circulación y disminuir las molestias. Afortunadamente todo evoluciona y ahora se pueden conseguir en distintos colores que pueden servir para lucir las faldas y vestidos mientras se disimulan las várices.
En muchas ocasiones se pueden eliminar mediante cirugías o terapias pero estos procedimientos pueden tardar un poco más y suponen una mayor inversión de tiempo y dinero. En cambio con las recomendaciones indicadas antes es más rápido y sencillo.