Desde el primer momento, dejó muy en claro que le importa la estética. Por eso, Sol Pérez (25) se presentó como una chica fit. Además de lucir un cuerpo súper marcado, cuida muchísimo su piel. También, sus dientes. Le encanta verlos blancos, usa un producto especial para que brillen en televisión.
Además de cuidar su figura, piel y dentadura, la participante del Bailando por un sueño 2018 protege muchísimo su casa. ¿De qué? ¡De las bacterías! Para sorpresa de todos, reveló en la mesa de Mirtha Legrand cuál es su llamativo toc: "Pensé que no me iba a pasar nunca, pero reconozco que tengo una obsesión con la limpieza".
"Pensé que no me iba a pasar nunca, pero reconozco que tengo una obsesión con la limpieza".
Este toc es nuevo. En el pasado, Sol era diferente. Claramente, todo cambió cuando se fue a vivir sola. "Antes, era súper desordenada. No me importaba nada. Estaba acostumbrada a que mi mamá limpiara e hiciera mi cama. Eso cambió", expresó la joven y agregó que si alguien se sienta en su cama tiene que cambiar las sábanas.
¡No tiene paz!