Radiohead es una de las bandas más importantes del Reino Unido y probablemente de las más icónicas y singulares del rock alternativo de las últimas tres décadas.
Sin embargo, como cualquier grupo musical existen canciones que no fueron tan famosas o sencillamente son consideradas como de “relleno” en las producciones discográficas. No obstante, la leal fanaticada siempre querrá estar al tanto de cada uno de los sencillos de sus bandas favoritas y Radiohead no es una excepción.
Acá están cinco de las canciones que solo los verdaderos fanáticos sabrán que existen.
Banana Co.: del álbum Pablo Honey (1993). Al escucharla puede recordar a Karma Police y es probablemente la canción más abiertamente política.
Critica a los países que ponen en la mira a otros menos desarrollados y bajo su esfera de influencia para su aprovechamiento, entiéndase a las “repúblicas bananeras”; por lo tanto, es una clara crítica a las acciones estadounidenses contra estas naciones. Esto representó solo el inicio de lo que se convertiría Yorke con el tiempo, un crítico de la explotación agrícola.
Killer Cars: del disco The Bends (1995). Antes de Airbag estuvo ésta y se caracteriza por reflejar las ansiedades físicas y el explícito temor del vocalista Thom Yorke por conducir y los carros en general.
La canción dice: "Voy a dar un pequeño paseo en coche y podría ser la última vez que me veas vivo” (I'm going out for a little drive and it could be the last time you see me alive)
Worrywort: del álbum Amnesiac (2001). La canción tiene una melodía serena, que al escucharla te hace sentir bien y en tranquilidad, tomando en cuenta que tiene frases que parecen obtenidas de sesiones de terapia del vocalista como “Ve y descansa un poco” (Go and get some rest), “es un día tan hermoso” (It's such a beautiful day).
Fog: del álbum Hail to the Thief (2003). La canción representa nuevamente la ilimitada creatividad de la banda, con un sencillo que se caracteriza por ser suave y contar con un hermoso piano y una melodía estremecedora que se entremezcla perfectamente con la letra.
I froze up: debutó en un webcast en el año 2002. Thom Yorke realizó la canción en solitario en un piano Fender Rhodes, con un bajo presupuesto y calidad de vídeo.
Éste era la única prueba de que alguna vez fue interpretada hasta que en el año 2010, Yorke la “revivió” en un concierto en Cambridge, Inglaterra y posteriormente en un concierto de Atoms for Peace en Chicago, siendo ésta la última vez que la cantó.