La imagen de un niño chino con el cabello y cejas congeladas por el frío caló hondo en las redes sociales, luego de conocerse que esto le sucedió por caminar a lo largo de cuatro kilómetros, bajo unas temperaturas gélidas, con la única intención de llegar a su escuela.
La información fue publicada por Thepapper.cn, donde aseguraron que Wang Fuman hace todos los días este recorrido desde su casa hasta la escuela de Zhuanshanbao, ubicada en la provincia de Yunnan.
Un profesor fue el encargado de hacer la famosa gráfica que se volvió viral, en la que se muestra al chico con las mejillas excesivamente rojas y con el cabello y las cejas blancas, mientras que al fondo se nota a un grupo de compañeros riéndose.
El director aseguró que el pequeño caminó a una temperatura cercana a los -9 grados centígrados con una ropa muy fina. Las reacciones en las redes no se han hecho esperar y mucha gente se ha ofrecido para regalarle ropa más adecuada, que pueda soportar este tipo de temperaturas extremas.
Wang es un niño de bajos recursos que habita en un sector muy humilde de la localidad Zhaotong, junto a su hermana y abuela. Sus padres trabajan en otras ciudades y esa situación impide que puedan acompañarlo diariamente al colegio.
Tras conocerse la noticia, las autoridades locales de la ciudad de Yunnan decidieron organizar un plan de desarrollo que permita adquirir ropa de invierno, la cual será donada a gran cantidad de niños que a diario deben pasar por situaciones extremas como la que vivió Wang.