De no creer. Y es que tras esperar durante 90 días que su nueva y costosa heladera llegara a casa, un hombre presenció el instante en el que el artefacto, valuado en 4.200 dólares, se les caía a los repartidores en la entrada de su casa.
Eso fue lo que le sucedió a Chad Jones, un hombre de Tallmadge (Ohio, Estados Unidos). Y es que este el cliente tomó conocimiento de lo sucedido gracias a la cámara de vigilancia que tenía instalada en la puerta.
Los mensajeros estacionaron el camión y bajaron la heladera. Luego la cargaron en una carretilla y uno de ellos comenzó a acercarla a su puerta. Sin embargo, el hombre no tomó el recaudo de atarla al carro y tampoco esperó a que su compañero lo ayudara.
¿Resultado? El electrodoméstico terminó cayéndose de frente contra el suelo. “¿Por qué no esperaste”, se le escucha decir al trabajador.
Por lo que se puede ver en el registro que fue viral, las puertas quedaron completamente rotas y colgando. Testigo del momento, Chad Jones decidió no aceptar la compra y es más, parece que los repartidores habrían intentado ocultar el daño.
Según explicó el cliente a Fox WJW, los repartidores le dijeron que venía dañado de fábrica, pero lo que no sabían era que los habían grabado. “Aunque fue su culpa porque no lo ató ni esperó a su compañero, yo estaba teniendo un mal día. Simplemente lo dejé pasar”, explicó el hombre.
“Era una heladera LG y costaba unos 4.200 dólares”, explicó a ABC el comprador. “Por suerte, nos quedamos con nuestra vieja heladera", añadió y explicó que está esperando que le llegue un reemplazo del artefacto.
Fuente: 20minutos.es