Detrás del romántico, elegante y fino vestuario de Velvet, la exitosa serie de Netflix, está la estilista Helena Sanchis, quien lleva más de 30 años vistiendo personajes en shows como Hispania, Imperium, Gran Hotel, siendo nominada a un Goya por su trabajo en la película Días Contados (1994).
“La verdad es que Velvet fue todo un regalo. Me dio la oportunidad de trabajar con una época preciosa y un equipo de lujo. Para el show nos empapamos con todo lo referente a los cincuenta. Lo bueno es que es una época bien documentada, y fue fácil entender y reproducir el estilo”, señaló Helena en una entrevista con el sitio Trendencias.
Explicó que junto con el equipo de producción, definió el tono del programa. De los cincuenta sacaron lo mejor y lo más interesante. Para cada personaje de la historia se manejó un código especial, teniendo en cuenta el porte de los actores para que todo pudiese integrarse en armonía.
“Hay muchos personajes de la historia que tuvimos como fuente de inspiración, por ejemplo, Alfred Hitchock. Su estética fue sugerente. La época en sí tuvo momentos ricos en la moda. Como Hitchock, otros más fueron imprescindibles para esta labor”, confesó Sanchis.
Los hermosos diseños de cada traje, de cada vestido en Velvet, se adueñaron de la atención del público y lo invitaron a un ambiente de ensueño.
“El vestuario fue voluminoso. Hice diseños propios, confeccionados por mí y otros llegaron de varias sastrerías. Los tejidos venían de Londres, algunas zonas alemanas y de Madrid. Tuvimos una pequeña selección con tocados originales y colecciones londinenses privadas”, reveló la estilista.
Sanchis aseguró que un personaje fue difícil de descifrar para ella. “Ana fue un desafío. Su estilo debía ser elegante pero contenido. Tuvimos que llegar a un punto de equilibrio sobre el color, las líneas y ausencia de complementos. Era un personaje muy sencillo, pero que destacaba por su personalidad y en eso Paula (Echevarría) fue de gran ayuda”, finalizó Helena.
