Cada vez que a Nicolás Cabré (39) le preguntan por Rufina (5) se le ilumina el rostro y se deshace en halagos hacia la hija que tuvo fruto de su relación con la China Suárez (27). Una de las claves de su orgullo como padre es la buena relación que logró entablar con su exmujer, con quien llegó a saludables acuerdos respecto de la forma de criar la Rufi.
Por eso, tras el auspicioso debut como protagonista de Departamento de Soltero junto a Laurita Fernández, su novia en la vida "real", el actor reflexionó respecto de su ajetreada agenda laboral y cómo la compatibiliza con el cuidado de Rufina: “Con la China nos organizamos bien. Tenemos los días que le corresponden a cada uno. Entendemos cuando el otro está en momentos como éste, a días de un estreno… Nos vamos adaptando”.
De esa manera, la China Suárez también puede contar con él en momentos en que estelariza ATAV, la ficción éxito del momento en la televisión argentina. “Una de las ventajas de tener buena relación es ésa, que le puedo decir: 'Mirá, estoy medio complicado. ¿La podés tener?'. Y al revés: '¿Te la puedo robar tal día?', que por ahí era el que iba a estar con ella”, concluyó Nicolás Cabré con sinceridad.