Este lunes pasado, el Teatro Regina se llenó de emoción y aplausos. En el marco del ciclo benéfico TEATRÍSIMO, Linda Peretz —actriz, directora y presidenta de La Casa del Teatro— volvió a interpretar su clásico unipersonal No seré feliz, pero tengo marido, una obra que marcó un hito en la cartelera porteña por su humor y su mirada lúcida sobre el amor y las relaciones.
Entre el público hubo una presencia muy especial: Natalie Pérez, pareja de Tomás Rottemberg —hijo de Peretz y del productor teatral Carlos Rottemberg—, quien no solo asistió a la función sino que también le dedicó un sentido mensaje en redes sociales.
“Tenía planes de ver este unipersonal en VHS, pero ayer cambió mi suerte y la pude ver en vivo. Linda Peretz, qué emoción verte en el escenario”, escribió Natalie, acompañando la publicación con un corazón azul.
El gesto de la actriz fue celebrado por colegas y seguidores, quienes destacaron la calidez y el respeto con los que Pérez se integró al entorno familiar de la reconocida artista.
UN GESTO DE AMOR Y ADMIRACIÓN
Desde que confirmó su relación con Tomás Rottemberg, Natalie se mostró cercana a Linda Peretz, con quien comparte una relación afectuosa y de mutua admiración. En varias oportunidades, la protagonista de Las Estrellas habló del valor que le da a los vínculos genuinos, y su presencia en el regreso teatral de su suegra no hizo más que reforzar esa imagen.
La función del lunes tuvo un valor simbólico: además de significar el reencuentro de Peretz con su público, fue una oportunidad para celebrar su legado en el teatro argentino. “Linda no solo volvió al escenario, volvió al corazón de todos los que la admiramos”, expresó una de las asistentes tras la función.