En la última semana la localidad cordobesa de Saldán se vio sacudida por el caso de un médico que contagió a decenas de personas de coronavirus en una residencia geriátrica, dado que desconocía que estaba enfermo porque era un paciente asintomático. La desgracia afectó a un total de 36 personas, en su mayor parte adultos mayores, según contó un periodista local en Nosotros a la Mañana.
“La mayoría de los infectados están bien, salvo tres viejitos que antes de anoche fueron trasladados a los hospitales Rawson e Italiano para ser evaluados porque levantaron temperatura. Pero el resto de los viejitos y trabajadores contagiados están bien y controlados”, afirmó Víctor Valente. Luego, le aclaró al Pollo Álvarez que se activó el protocolo y que todos “están aislados con todas las medidas que corresponde”.
"El médico emitió un comunicado dolido, compungido, muy asustado y preocupado por las barbaridades que se dijeron".
Por otra parte, el periodista contó del descargo que realizó el matriculado: “El médico emitió un comunicado dolido, compungido, muy asustado y preocupado por las barbaridades que se dijeron. Fue la única carta que utilizó el profesional para explicar lo sucedido y dejar clara la situación. No se quiere exponer más en los medios porque fue agredido, vapuleado, maltratado”.
Con tan solo ocho meses vinculado al geriátrico, el profesional de la salud es conocido en el pueblo porque además hace años tiene un consultorio en Mendialoza, una localidad muy cercana. “A raíz de esto, hay otro grupo muy grande de vecinos de las sierras que también hicieron otra carta en adhesión al médico”, reveló Valente.
El descargo del médico: "El punto no es encontrar a un culpable, no lo hay, es una pandemia propagada a nivel mundial. El asunto es que dejen de señalarme a mí y a todo el personal de salud que nos jugamos la vida y la de nuestras familias por ustedes".
De todas formas, el Ministerio de Salud radicó una denuncia penal contra las autoridades del geriátrico Santa Lucía, ya que habrían incumplido en su deber del cuidado y salud de los adultos mayores a su cargo, además de actuar de manera negligente.
El descargo del doctor
Soy el médico al que le dio positivo el test de Covid-19 que realicé de modo voluntario. Desde entonces, he recibido críticas, insultos, escraches, difamaciones y mentiras sobre mi persona y mi familia. Me siento absolutamente denostado, discriminado y condenado por todos los medios de comunicación que sin mi autorización difundieron mi nombre y apellido, junto con todo tipo de falsedades. Además divulgaron un audio que envié a un grupo de Whatsapp, tergiversaron mis palabras y sacaron conclusiones a su antojo, hasta se comentó de un posible viaje al exterior, lo cual es absolutamente falso. Me acusaron de haber cometido el grave delito de contagiarme el virus asistiendo y salvando las vidas de mis pacientes, poniendo en riesgo mi propia vida y la de mi familia.
De los tres lugares donde trabajé, únicamente en el geriátrico de Santa Lucía han dado casos positivos de Covid-19, pero en los medios y en las redes sociales me acusaron de haber contagiado y puesto en riesgo a toda la población. Lamento profundamente lo que ha pasado y entiendo el enojo de los familiares e incluso de los empleados. Para ellos yo soy el culpable del contagio, porque así me hicieron aparecer medios, pero en realidad es probable que yo me haya contagiado allí.
El punto no es encontrar a un culpable, no lo hay, es una pandemia propagada a nivel mundial. El asunto es que dejen de señalarme a mí y a todo el personal de salud que nos jugamos la vida y la de nuestras familias por ustedes. Sean solidarios y más empáticos con nosotros.