A su manera. Así es como los integrantes de la familia Bosze decidió realizar su cuarentena frente a la pandemia de Covid-19.
Y es que ya en julio de 2020, este matrimonio amante de la navegación y sus dos hijas iniciaron una extensa travesía en barco a fin de evitar, al seguir en tierra firme, el contagio de coronavirus.
Refugiados en su bote, al que bautizaron Teatime, los cuatro emprendieron su aventura, que inclusibe tenían planeado desde antes de la pandemia. Así es como durante más de 7 meses, los Bosze han visitado Croacia, Italia, España, Cabo Verde, Martinica, región francesa en la que pasaron la Navidad, y ahora se encuentran en la isla caribeña de San Martín.
“Para mí es una experiencia fantástica poder pasar mucho más tiempo con mis hijas, en lugar de llegar tarde a casa del trabajo totalmente agotado”, declaró a Reuters Domonkos Bosze.
El padre también ha instalado instalado una oficina en el barco para hacer teletrabajoen su área: las tecnologías de la información. Las dos pequeñas, de 6 y 8 años, también han estado tomando clases a distancia.
Según explicaron, el mayor problema que se han encontrado, además de una tormenta de seis horas que vivieron en el Atlántico, ha sido a la hora de desembarcar. “En Martinica solo nos dejaron entrar al saber que llevaban 16 días navegando tras haber abandonado otra región y eso les valió para demostrar que habíamos pasado la cuarentena”
Su próximo destino, tras dejar San Martín, dicen, es el canal de Panamá y sus planes son seguir navegando durante este año y el siguiente por el Pacífico. Lo sorprendente es su viaje podría durar unos 5 o 6 años, ya que pretenden pasar temporadas más largas en el Pacífico Sur y en el océano Índico.
Fuente: 20minutos.es