Lo suyo era ser actriz, pero en sus inicios Natalie Dormer no la tuvo nada fácil y aún así no se desesperó. Mientras llegaba el papel de su vida se mantuvo haciendo otros oficios diferentes a la actuación, sin que menguara su pasión por esta.
Pero llegó el día y la oportunidad de demostrar su talento. Lo hizo gracias a su interpretación de Ana Bolena, una reina de Inglaterra en la serie Los Tudor con la que su nombre comenzó a hacerse sentir.
Sin embargo la joven nacida en Berkshire, Inglaterra, iría por más, así que la vimos destacarse en Juegos del Hambre, una saga más de corte juvenil y sobre todo en Juego de Tronos, una serie que terminó siendo aclamada y conocida en todo el mundo, lo que definitivamente la catapultaría en la industria del cine.
A continuación te presentamos algunos aspectos de su vida hasta ahora desconocidos:
- Apenas nació la pequeña Natalie sus padres se separaron, por lo que desde entonces ha vivido junto a sus hermanos Mark y Samantha y su padrastro.
- Durante su época de escuela fue una excelente estudiante al punto que fue seleccionada como delegada de curso. Pero no se quedó ahí sino que también su proactividad la llevó a participar como subcapitana en el equipo de baloncesto y hasta participó en el equipo de debate del colegio que la llevó por todo el mundo
- Fueron precisamente sus buenas calificaciones que se mereció un cupo para cursar Historia en la Universidad de Cambridge. Pero desde ya su pasión por la actuación estaba presente, así que optó por irse a la Academia Webber Douglas de Arte Dramático de Londres.
- Habían pasado ocho meses de su graduación en la academia cuando tuvo la oportunidad de participar en la cinta Casanova, en la que compartió con Sienna Miller y el actor fallecido Heath Ledger.