A raíz de las polémicas imágenes del hijo de ocho años de Dolores Barreiro manejando un cuatriciclo, Los Ángeles de la Mañana invitó al ciclo a Silvia Fredes, integrante de la Asociación Civil Madres del Dolor, para generar consciencia sobre el peligro de estas imprudencias al volante.
La hija de Silvia, Martina Miranda, murió a sus 16 años el 14 de febrero de 2016 cuando fue atropellada por Damián Villanueva, quien cruzó a toda velocidad avenida Scalabrini Ortiz, huyó en contramano por Corrientes y dos días después del hecho se quitó la vida.
Fredes contó su dolorosa historia con una entereza que emocionó a todos los integrantes de LAM, especialmente a Yanina Latorre, quien se quebró al escuchar su relato: “A mí me pasó que pude salir pensando en que si ella no tuvo la posibilidad de seguir viviendo y uno está acá, es por algo. Entonces, sino salís es faltarle al que se nos fue. Duele cuando es por descuido ajeno, por alguien que no tiene consciencia de la otra vida”, afirmó Silvia.
Entonces, Ángel de Brito le preguntó: “¿Y qué le decís a las personas que no tienen consciencia y cometen estas imprudencias?”.
Yanina le preguntó a Silvia: “¿No eran enloquecedoras esas noches?”, a lo que la mamá de Martina contestó “sí, pero una de las preguntas que te hacés es ¿por qué sale el sol?”.
Entre lágrimas, ella respondió: “Que no saben el dolor que ocasionan después de esto. No se termina detrás de una estrella amarilla que ponemos nosotros donde murió alguien. Había una vida en ese nombre, una historia, un montón de proyectos”.
“Martina quería ser forense y yo siempre tuve el sueño de verla hacer ese trabajo. Y la vi que la subían a una morguera. Ella estaba en cuarto año en un colegio que estaba cerca de su casa, tenía su grupo de amigos desde la primaria”, agregó, recordando a Martina.
“¿Cómo son los procesos del dolor? ¿Qué pasa después del shock inicial?”, le preguntó Karina Iavícoli. Y Silvia explicó: “Al principio empezás a pensar que es un sueño y te lleva un lapso largo querer saber que vas a despertar. Después ves que tu mundo es demasiado grande y el silencio también, empezás a sentir que la noche es tu mejor compañía y el día se te hace eterno. Yo vivía al revés, estaba despierta de noche y dormía de día”.
Sin poder contener las lágrimas, Yanina le preguntó: “¿No eran enloquecedoras esas noches?”, a lo que la mamá de Martina contestó “sí, pero una de las preguntas que te hacés es ¿por qué sale el sol?”.
Para contactarse con la Asociación Civil Madres del Dolor se puede comunicar de forma gratuita al 080022 AYUDA (29832)