Si hay algo que caracteriza a Maju Lozano (46) es su risa franca y estruendosa. La conductora de Todas la tardes utiliza su gran sentido del humor como un mecanismo de defensa, anclado en una triste historia familiar.
Maju habló a corazón abierto sobre cómo fue vivir con un papá, diagnosticado como bipolar, quien falleció en 2012. “Tener un padre psiquiátrico es tremendamente duro. Mi papá era una bomba de tiempo. Tuvo crisis agresivas, de romper cosas, de generar situaciones tremendas. Viví mucho en estado de alerta”, confesó en una entrevista con la revista Luz.
“Esto lo pude ver después de muchos años de terapia, porque uno generalmente naturaliza lo que le pasas. Cuando se murió, me cayeron muchas fichas. En el momento, cuando él vivía, uno no cuestiona, está sobreviviendo”, continuó Maju, con dolor.
“Ojo, nunca me pesó él, era adorable y hasta en momentos tremendos tenía sentido del humor, pero sí su enfermedad. Lo que me fortaleció de todo eso fue la capacidad de la aceptación ante las cosas que suceden”, concluyó Lozano.