En medio de la polémica que despertó Nicole Neumann al anunciar que se había contagiado de Covid-19, Pampita llamó a Fabián Cubero a acercarse a su ex para ayudarla con lo que necesite. Esto ocasionó a su vez que Mica Viciconte salga a rebatir los dichos de la conductora alegando que 'no puede hablar sin saber lo que pasa puertas adentro'.
“Yo, si fuera Cubero, aprovecharía esta semana para demostrar todo el amor que le tengo a mis hijas y me acercaría todos los días a verlas. No hace falta una excusa. Tal vez tus hijas están atravesando esta enfermedad a pesar de ser asintomáticas. Está bueno estar presente no solo a través de un teléfono”, dijo la conductora de Pampita Online en su ciclo.
Este jueves, consultada por el móvil de El show del problema, la modelo reafirmó sus dichos aunque con una aclaración. "El consejo es siempre para los ex, para los hombres que ya no viven en la misma casa. Si su mujer y sus hijas están transitando una enfermedad, ahí yo dejaría todo de lado y actuaría de la mejor manera, estando a disposición al cien por cien. (...) Era un consejo generalizado para cualquier ex cuya expareja está en su casa con una enfermedad, iba por ahí", dijo.
Consultada por Nicolás Magaldi Viciconte se mostró sorprendida por la opinión de Pampita y decidió 'ponerle los puntos' en vivo. "Primero, obviamente primero tiene que conocer la interna. Uno no puede hablar sin saber lo que pasa puertas adentro. Es muy fácil hablar o dar un consejo cuando la realidad es absolutamente otra. Segundo: nadie hostiga a nadie. Yo no salí a hablar del tema en ningún medio porque dije 'es un tema de salud en el que no me voy a meter y no voy a hablar' así que pueden buscar que en ningún momento hablé y en ningún momento mandé una indirecta, ni subí una story criticando a nadie", dijo Mica con su habitual verborragia.
"Después, me parece que no se demuestra el amor de esa manera. El amor se demuestra día a día. No hay que demostrar a nadie o hacer caridad. Están equivocados: el amor se demuestra a puertas cerradas", aseveró, chocando una palma contra el escritorio.