A mediados de marzo, cuando Laurita Fernández regresó desde los Estados Unidos, se puso en cuarentena obligatoria. Desde ese momento está refugiada, ya que después el aislamiento social y preventivo pasó a ser obligatorio para todos los ciudadanos, hayan viajado o no.
A través de Instagram, la bailarina, que se mudó a la casa de Nicolás Cabré porque en su edificio se rompió un caño, recordó uno de los momentos más significativos de su estadía en Nueva York.
"Creo que cuando termine todo esto voy a volver a llorar igual".
Junto a una selfie en la que se le ve radiante y sonriente con un hermoso paisaje de fondo, expresó cómo se siente.
"Esta es una selfie de un momento muy especial para mí. Fue en el último viaje, el último día me tomé un barquito y miré la ciudad, el cielo, el agua, las gaviotas... Y no se qué me pasó, me emocioné. Mucho. Sentí una mezcla de sensaciones hermosas y saqué la foto para guardarme el recuerdo. Creo que cuando termine todo esto voy a volver a llorar igual", contó.
¡Buenos recuerdos!