En cuarentena por el coronavirus tras llegar a la Argentina desde Miami, Jimena Barón fue blanco de nuevas críticas tras intentar ponerle humor a sus días de encierro y bromear con la situación que tiene en vilo al mundo.
Indignado por un video que la actriz y cantante subió a Instagram, en el que se la ve jugando con un rollo de papel higiénico sentada en un inodoro, Rodrigo Lussich arremetió contra ella en Intrusos.
"Creo que hoy, jugar con esto, es un acto de cinismo. Y no lo creo solo de Pachano, lo creo de Jimena Barón que se sienta en un inodoro y juega con que se le acaba el papel higiénico. Los famosos juegan con una impunidad que va al borde, que no corre para todo, que no va para todo. Creen que porque son graciosos en las redes y tienen millones de seguidores pueden hacer lo que quieren. Entonces, caen en una impunidad cínica", dijo el periodista, sumándose a los cuestionamientos que cosechó Barón en las redes sociales.
"Fueron muchos videos parodiando demencialmente la cuarentena. Hay mucha gente que se ríe, es la idea. Es mejor ignorar al que no bancamos".
Sin ánimo de dejar pasar los dardos, Jimena lanzó al mundo virtual una catarata de tweets en las que explicó su comportamiento, en pleno aislamiento social, y reflexionó sobre el amor y el odio.
"Yo, escondiendo la chabomba, armando el video de la nueva polémica. Ay, ay, ay. Besos chicos, les mando más besos", escribió la artista en uno de los tweets, para luego dar comienzo al descargo.
"A ver chicos, fueron muchos videos parodiando demencialmente la cuarentena. Estoy en chabomba actuando. Hay mucha gente que se ríe, es la idea. Es mejor ignorar al que no bancamos. Los que me odian, laburen esa obsesión, les va a hacer mal. Besos virtuales a todos por igual. PD: Cuando perdí la final del Bailando (2018) subí un video igual, con el trofeo ‘cebollitas’ por toda la casa, sola, uno actuando que hacía pis. Igual. No pasó nada más que gente que se cago de risa. Dato curioso", expresó Barón.
"Me entristece la necesidad de odiar. Entiendo que está todo muy podrido y que hay una furia instalada, pero me da tristeza que se fomente, se elija y se disfrute".
En esa línea, continuó: "Y si les indigna “el humor” con respecto a la situación que estamos viviendo, no creo que hacer chistes con internaciones, psiquiatras y pastillas sea ejemplo de nada. Yo siempre me río de mí misma, hasta cuando se ríen de mí con mala leche. Lo lamento, pero me hacen reír también".
Y finalizó: "Me entristece la necesidad de odiar, en general. Entiendo que está todo muy podrido y que hay una furia instalada, pero me da tristeza que se fomente, se elija y se disfrute. Una especie de obsesión con el odio y el odiado. Agresión, pochoclos y ver si logramos tirar al otro y gozarlo. Los que puedan aprovechar el tiempo de encierro para jugar y conectar con la familia, háganlo. Dicho esto, desconecto y arranca el campamento en casa (dormir en el sillón con la sábana onda carpa). Que descansen".