Una fractura en la costilla dejó a Barby Silenzi fuera de la pista de La Academia, certamen en el que bailaba junto al Polaco. Pretendiendo la rápida continuidad del cantante de cumbia en el programa de Marcelo Tinelli, la producción designó a Celeste Muriega como la bailarina reemplazante.
Desanimada por lo ocurrido, Barby acompañó a su pareja en el último ritmo. Silenzi lo miró desde un costado y los celos personales y profesionales hacia Muriega habrían aflorado.
"A mí me contaron los técnicos que hubo un momento incómodo, porque El Polaco y Celeste terminaron la pasada, les encantó, y todos la aplaudieron a Celeste. Entonces, Barby se le fue a la yugular al Polaco", describió Maite Peñoñori en LAM, dándole el pie justo a Ángel de Brito para que emita una filosa observación al respecto.
"Barby habrá visto que Celeste está bailando mejor con ella. Barby está como desinflada".
"Barby habrá visto que Celeste está bailando mejor con ella. Barby está como desinflada", disparó el conductor y uno de los jurados de La Academia, quien además de criticar la actitud de Silenzi apuntó contra la falta de gracia en las previas de Celeste Muriega.
"Muriega me parece aburrida, pero baila bien. Siempre la elogié, le puse buenos puntajes en el otro Bailando, que llegó hasta octubre, noviembre...", dijo Ángel. E ironizó, filoso: "En las previas es un plomo, pero mirá si la naturaleza es sabia que volvió al certamen, en el ritmo que no hay previas, porque es duelo".