Sin el bullicio mediático al que está acostumbrada, Amalia Granata encontró una nueva faceta en su vida. Ahora, la modelo tiene más tiempo para dedicarle a su hija Uma, fruto de su relación con el Ogro Fabbiani. ¡Pero ojo! A sus 31 años, ella no descuida su figura y sigue “ratoneando” a la platea masculina, a pesar de esquivar la pantalla chica.
“¿Qué me faltaría para ser vedette? Y, para estar arriba de un escenario, bajar dos kilos... No estoy gorda, ni me veo mal, sino que es un tema estético"
Por este motivo, Granata se animó y fue protagonista de una producción de fotos muy sensual para la revista Paparazzi. Además, la modelo cuenta cómo es su vida sin la televisión.
“Tengo un montón de tiempo para muchas cosas que antes no hacía, como por ejemplo ser madre. Puedo hacer otras cosas como bañarla, cocinarle y llevarla al colegio”, dijo. Pero aclaró: “Tengo que volver a trabajar por una cuestión económica, pero la verdad que no extraño a la televisión. Estuve muchos años metida en una vorágine muy grande ¡y no me daba cuenta!”
Sobre el escándalo que terminó con su despido de América, ella expresó: “Quizá no me manejé bien en cómo me expresé, con las palabras que usé, y haciéndolo público en Twitter, tirándolo en contra del canal que trabajaba. Me arrepiento del modo, pero no de lo que dije”
También habló de su físico y de su secreto para verse mejor: “Me siento plena. Quizá no tengo un físico que raja la tierra, pero me siento cómoda. Y si alguna vez llegara a tener algún mambo, lo disimulo. ¿Me veo gordos los brazos? ¡Uso manga larga! No me complico”.
Por último, Granata no descarta ser vedette: “Me gustaría ser vedette porque nunca lo hice. ¿Qué me faltaría? Y, para estar arriba de un escenario, bajar dos kilos. No estoy gorda, ni me veo mal, sino que es un tema estético. Hace falta un físico más marcado, un cuerpo tipo Adabel Guerrero”.
¡Mirá las fotos más sensuales de Amalia Granata!