Amalia Granata se considera la niña mimada del conductor de "Un mundo perfecto", y su apreciación no estaría tan errada si se tiene en cuenta que, de las mujeres que pasaron por el panel del ciclo, es la única que sobrevive. No obstante este año, Roberto Pettinato perdió su exclusividad con Amalia ya que, a la par de su trabajo en América, ella se convirtió en una de las participantes de "Bailando 2010".
Primeramente, los hechos demostraban que había sido convocada por Marcelo Tinelli para enfrentarse con Vanucci, pero al irse esta última, Granata quedó sin contrincante, hasta que apareció Reina Reech y la ex del Ogro recuperó su perfil de mujer combativa y de lengua filosa.
Por este motivo fue invita a "BdV", sitio en el que, además de volver a despotricar contra la jurado del certamen y señalar otras preferencias (como la de Emilia Attías, Luly Salazar y Juana Repetto), se refirió a una antigua disputa entre sus dos actuales jefes. Vale recordar que, tiempo atrás, fue vox pópuli la mala relación que existía entre Tinelli y Pettinato, pero ahora, muchos desconocían en qué estado se encontraba esta ¿guerra de egos?, y vino bien Amalia para dar una respuesta: "Creo que la pelea se dio cuando Roberto estaba en el 13 y Tinelli le entregaba el programa a cualquier horario", refrescó memorias la panelista.
Pero, acto seguido, se prestó a recordar que eso ya pasó y que ahora Petti no tiene ningún problema con Tinelli: "De hecho yo lo jodo preguntándole cuando me va a ir ver bailar, y capaz que en algún momento aparece". A continuación, De Brito quiso sembrar cizaña pidiéndole que eligiera a uno entre los dos y Amalia no dudó ni un instante: "Son muy distintos, pero yo me siento más identificada con Roberto".
Así, con la preferencia sellada, "la chica de la eterna polémica" espera que en algún momento su jefe predilecto la apoye en vivo, y de paso, puede que se produzca la reconciliación pública entre dos de los conductores más importantes de la televisión.