Antes de que Julieta Prandi se siente a contar en detalle el infierno que asegura haber vivido con Claudio Contardi, la modelo hizo un firme pedido al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°2 de Zárate-Campana.
Por la mañana del miércoles, Javier Baños enfatizó ante la prensa: “Lo único que queríamos pedir es que se garantice su seguridad, no revictimizarla y que el imputado esté en una sala contigua”.
Más allá del escándalo que provocó que se pase a un cuarto intermedio, cuando los abogados de Contardi intentaron que sea sustancie un juicio por jurados en el futuro y no el actual, al rato la Justicia accedió al lógico pedido de Prandi.
Así fue que, como el imputado tiene derecho a escuchar la declaración de la querella, el letrado confirmó que “se terminó poniendo un bombo”.

“Lo pedimos porque Julieta no quería saber nada con estar mirándole la cara al imputado y tenía razón. Lo venimos pidiendo de la audiencia de 338, y no había medios electrónicos...”, lamentó por la tarde el abogado en referencia a la posibilidad de que el juicio se realice vía Zoom.
EL OTRO PEDIDO DE JULIETA PRANDI
Por otra parte, Prandi tendría decidido permanecer en la sala durante todo el juicio, que duraría hasta el viernes con los alegatos finales de cada parte.
En cuanto al veredicto, en caso de que Claudio Contardi sea encontrado culpable, la pena iría desde los 8 hasta los 50 años de prisión, con lo cual no podría evitar la cárcel una vez que la condena quede firme tras las eventuales apelaciones.
Además, el abogado de Julieta Prandi adelantó que plantearán que no vuelva a sentarse en el banquillo a declarar para evitar la revictimización.