Pablo Goycochea, marido de Florencia de la Ve, vivió un momento desagradable el último fin de semana en la puerta del Teatro Luxor de Villa Carlos Paz, donde su mujer protagoniza Stravaganza.
"Fue una abuelita de 88 años que se cayó en el afán de hacer pie para evitar que la chocara. No hubo casi contacto".
Como informó Ángel de Brito en su columna de Ciudad.com, Goycochea protagonizó un accidente de tránsito con tres señoras cuando intentaba ingresar al estacionamiento del lugar con su automóvil y una mujer de 88 años resultó herida.
Al conocerse la noticia, Goycochea habló con Jorge Rial en su ciclo radial Ciudad Goti-K y contó detalladamente qué fue lo que sucedió: "Tuve un accidente de tránsito, algo menor. Más allá del accidente, que es real, no es tal cual se dice que atropellé a tres personas”, aclaró.
“El tema fue así. Yo estoy ingresando al estacionamiento del Teatro Luxor y, como siempre, tomo los recaudos de que no se cruce nadie porque hay muchas personas en el lugar. Detengo la marcha, freno la camioneta a cero y cuando veo un claro para pasar, paso. Las únicas tres personas que avanzaron fueron ellas cuando yo también avancé. Y cuando veo que se me lanzan por la parte de delante de la camioneta, freno automáticamente y ellas también frenan como atajándose, por lo cual casi no hubo contacto", relató Pablo.
Preocupado de que no se distorsione lo sucedido, Pablo continuó: "Eran tres señoras, familiares, una madre con su hija y su nieta. La señora que se cae es la abuelita de 88 años que iba del lado de la pared, con lo cual ni siquiera la toqué. Pero se cae al ser una señora de edad tan avanzada."
¿Qué hizo cuando vio que se cayó la señora? “Puse balizas, estaba la policía de tránsito y pedimos una ambulancia. Ellas ni siquiera querían hacerse revisar pero yo pedí que las viera un médico porque podían tener algo. Constataron que aparentemente no había ningún problema, por lo que nos quedamos todos tranquilos. De todas maneras, se hicieron estudios complementarios y le diagnosticaron que la mujer no tenía fracturas. Así que nos fuimos todos contentos a descansar”.
"Ellas no querían ser atendidas. Con decirte que ellas lo único que me dijeron fue ‘invitanos a la obra que queremos ver a Flor’. La abuela se reía".
Sin embargo, la abuela no se sintió bien y Pablo la acompañó en todo momento: “La señora pasó la noche muy dolorida. Al otro día yo fui a su casa en Carlos Paz y convenimos que lo mejor era que se trasladara a su ciudad, en el interior de Córdoba, donde iba a estar contenida por su familia e iba a ser atendida por sus médicos de confianza. Le dieron los calmantes correspondientes y la abuela mejoró. Ahí constataron que tenía una lesión en la cadera y recién me mandó un WhatsApp, la más chica de las tres mujeres, Sofía, y me dijo que la operación había salido bien, que está perfecta".
“Fue una abuelita de 88 años que se cayó en el afán de hacer pie para evitar que uno la chocara. No hubo casi contacto. Fue un caso de mala fortuna porque de no haberse caído la abuela, no pasaba nada. Sinceramente, nunca me había pasado una cosa de estas y no quiero ni pensar lo que debe ser atropellar realmente a una persona. Pasé dos noches mal, afligido y a su vez queriendo que la abuelita estuviera bien. Yo hice todas las denuncias correspondientes en la compañía de seguros y Sofía me acaba de avisar que ellas también las hicieron”, agregó.
Por último, contó la curiosa reacción de las mujeres cuando vieron que se trataba del marido de Flor de la Ve: “Fue un momento de mala fortuna, nada más. Con decirte que ellas lo único que me dijeron fue ‘invitanos a la obra que queremos ver a Flor’. La abuela se reía. La verdad que tiene un ánimo bárbaro a sus 88 años”.