Netflix estrenó recientemente una serie brasileña que ya está dando mucho que hablar, y no es para menos: se adentra en un mundo lleno de lujo, ambición y competencia, y explora la violencia, la corrupción y la lucha de poder entre los líderes de la industria del juego ilegal.
Se trata de Los dueños del juego, el drama criminal creado por Heitor Dhalia, Bernardo Barcellos y Bruno Passeri cuenta con ocho episodios, con una duración aproximada de 50 minutos cada uno.
Con una producción visual que captura la esencia del cine brasileño contemporáneo, la historia desempolva tradicionales desigualdades sociales, la corrupción política y las ambiciones que transforman la ciudad.
De qué trata Los dueños del juego
Ambientada en un momento clave para Brasil como la posible legalización del juego, la serie muestra una guerra silenciosa entre clanes familiares que durante años controlaron el negocio clandestino.
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En ese contexto surge un joven decidido a cambiar las reglas y escalar a cualquier precio, enfrentándose a una estructura criminal tan poderosa como peligrosa.
Los dueños del juego sigue a Profeta, un joven brillante y ambicioso que quiere conquistar su espacio dentro del ilícito negocio del juego en Río de Janeiro. Para él, la suerte no alcanza: hay que tomar decisiones drásticas que pondrán a prueba su moral, sus vínculos y hasta su propia vida.

En un mundo donde las reglas se escriben con dinero y sangre, cada movimiento puede desencadenar una batalla final por el control del negocio.
Quiénes actúan y sus personajes
El elenco de Los dueños del juego está integrado por André Lamoglia, como Profeta; Giullia Buscacio hace de Susana Guerra; Mel Maia, como Mirna Guerra; Xamã, en el papel de Búfalo; Juliana Paes, como Leila Fernandez; y Chico Díaz, actúa de Galego Fernandez.
Acompañan en la ficción Adriano Garib como Nélio; Bruno Mazzeo es Renzo Saad; Roberto Pirillo interpreta a Jorge Guerra; Tuca Andrada como Marcio Saad; Henrique Barreira como Santiago Fernandez; Ruan Aguiar es Esqueleto; Igor Fernandez interpreta a Sombra; y Pedro Lamin como Nelinho.
Completan Stepan Nercessian, Dandara Mariana, Késia Estácio, Breno de Filippo, Ronald Sotto y Ágatha Marinho.

Qué significa el final de Los dueños del juego
En esencia, el final de la serie brasileña se presenta como una parábola del poder. ¡Ojo, a continuación de aquí hay spoiler!
Profeta, quien comenzó como un aspirante externo, se transforma en heredero gracias a una mezcla de ambición, estrategia y la revelación de un linaje oculto.
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Entonces, al asumir el trono, se convierte en “el repartidor de cartas” en lugar de solamente un jugador. Pero el triunfo viene con una advertencia: la lealtad es frágil y el secreto puede destruir lo que se construyó.
Aunque termina la primera etapa, el final deja en claro que el negocio del juego es cíclico y que el poder obtenido puede estar en peligro mañana.
De este modo, la serie no ofrece un final feliz tradicional sino un cierre que abre hacia una continuación: Profeta se encuentra en soledad en la cima, y el espectador percibe que la guerra por el control apenas cambia de cara.



