La vida moderna está marcada por la presencia constante de pantallas, lámparas LED y dispositivos electrónicos.
Pero lo que parece inofensivo puede tener consecuencias profundas: la luz azul que emiten estos aparatos está alterando nuestro sueño y acelerando el envejecimiento celular, según advierten investigaciones recientes y referentes en longevidad.
Cómo afecta la luz azul al cuerpo
Estudios internacionales demostraron que la exposición continua a la luz azul interfiere en la producción de melatonina, la hormona clave para dormir bien.
Además, altera los ritmos circadianos, impacta en la calidad del sueño, debilita el sistema inmune y puede acelerar el envejecimiento de las células.
El problema no es solo dormir mal: la falta de descanso afecta la salud metabólica, la memoria y hasta el estado de ánimo. Por eso, cada vez más especialistas insisten en la importancia de cuidar la relación con la tecnología.

Herramientas y hábitos para protegerse
Para contrarrestar estos efectos, los expertos recomiendan tres estrategias clave:
- Usar anteojos blueblockers en horarios nocturnos, que bloquean la luz azul y ayudan a proteger el ciclo natural del sueño.
- Exponerse a luz roja e infrarroja de manera controlada, ya que promueve la regeneración celular y favorece el descanso.
- Ajustar la rutina de exposición solar, sobre todo a primera hora del día, para sincronizar el reloj biológico y mejorar el bienestar general.
“No se trata de demonizar la tecnología, sino de aprender a usarla a favor de nuestra biología. Pequeños cambios de hábito generan un gran impacto en nuestra calidad de vida”, explicó el Dr. Marcos Apud, psicólogo, biohacker y wellness coach argentino.
La clave está en el ambiente, no solo en los genes
La ciencia actual sostiene que la genética explica solo una parte de nuestra salud.
“Más del 90% de nuestro bienestar está influenciado por factores epigenéticos: alimentación, ejercicio, manejo del estrés, pensamientos, vínculos y ambiente. Está en nuestras manos mejorar la salud metabólica y prevenir enfermedades crónicas”, detalló el Dr. Fernando Santana, médico cirujano y referente en medicina antienvejecimiento y longevidad saludable.
Longevidad y prevención: el debate llegó a la Argentina
Estas tendencias y recomendaciones formaron parte del debate global sobre longevidad.
En la Argentina, el tema fue protagonista en el Forever Young Longevity Summit, que se realizó en Junín, provincia de Buenos Aires.
Durante tres días, referentes internacionales en medicina preventiva, neurociencia y nutrición compartieron avances científicos y prácticas para vivir más y mejor.
“Nuestro objetivo es acercar la ciencia al día a día de las personas, con herramientas prácticas y accesibles para vivir mejor”, señaló Eduardo Dimarco, fundador del encuentro Forever Young.