Los huesos humanos encontrados en una propiedad de Coghlan donde vivió Gustavo Cerati pertenecen a Diego, un adolescente de 16 años que estaba desaparecido desde 1984.
La confirmación llegó tras una prueba de ADN, y ahora la causa da un giro: se investiga un posible homicidio.
Según reveló Clarín este miércoles, los restos corresponden a un joven que jugaba al fútbol en el club Excursionistas y asistía a la Escuela Nacional de Educación Técnica (ENET) N°36.
La última vez que fue visto con vida fue el 26 de julio de 1984, en la esquina de Naón y Monroe, a pocas cuadras de la casa ubicada sobre la Avenida Congreso 3742.
El hallazgo se produjo el pasado 20 de mayo, cuando obreros que trabajaban en la demolición de la vivienda encontraron restos óseos humanos, junto con otras pertenencias: un reloj, una suela de zapato, una moneda japonesa de 5 yenes y una corbata con botones adheridos, que habrían pertenecido a una campera de jean.
La degradación de la prenda fue clave para estimar la antigüedad del entierro.

Los detalles del hallazgo llamaron la atención del sobrino de Diego, quien aportó información coincidente con los elementos encontrados: la edad, la ropa, la contextura física y el sexo del cuerpo.
La prueba genética terminó de confirmar lo que la familia sospechaba desde hace semanas: los 150 huesos hallados pertenecían al adolescente desaparecido hace más de 40 años.
La casa de Gustavo Cerati, una propiedad con historia
La vivienda donde fueron encontrados los restos había sido alquilada entre 2001 y 2003 por Gustavo Cerati.
La dueña era la artista plástica Marina Olmi, hermana del actor Boy Olmi, quien en ese período residía en España. Hace dos años, la propiedad fue vendida y se inició la construcción de un edificio.
El hallazgo de los huesos se produjo cuando, durante una excavación, un bloque de tierra se desprendió desde la casa lindera, dejando al descubierto los restos humanos.
“En un momento dado, se desprendió un trozo de tierra de la casa lindera y quedaron a la vista lo que aparentarían ser restos óseos humanos“, detalla el parte policial al que accedió TN.
Por el momento, los investigadores intentan establecer el vínculo entre el joven y los antiguos moradores de la casa. La causa continúa en etapa de recolección de pruebas y la hipótesis de un crimen cometido en la década del 80 cobra cada vez más fuerza.