Hoy se celebra el día mundial del Emoji, y para conmemorarlo debes conocer en primer lugar de dónde surgieron y cuál es su historia.
Todo comenzó cuando en el año 1995 un diseñador de origen japonés, conocido como Shigetaka Kurita, registró el dibujo de un corazón para los teléfonos de Docomo, la compañía móvil donde el diseñador trabajaba y partir de allí hizo oficial el nacimiento de una nueva forma de comunicación.
Esto no fue todo, pues desde entonces se encargó de desarrollar 176 caracteres basados en la cultura japonesa, y a partir del 2004 se oficializó el 17 de julio como el día mundial del Emoji. La fecha coincide con la que figura en el calendario Emoji de Android y iOS.
Siendo así, el primero de todos fue el corazón y a partir de allí hay una innumerable cantidad de opciones disponibles, a la cual se suman nuevas propuestas cada año con una aceptación del público realmente vertiginosa.
Sin duda, los emojis son cada vez más utilizados por las personas de todas las edades, quienes los han ido incorporando a su lenguaje cotidiano por variadas razones.
Si vamos al pasado, los emojis se pueden considerar jeroglíficos modernos, un modo de escritura antiguo que utilizaban los mayas y egipcios para comunicarse y expresarse de manera sencilla y unívoca.
Ahora, los emojis resignificaron ese propósito en el cual no sólo es una alternativa a la economización del lenguaje, sino también para enriquecerlo añadiendo acepciones y cargas emotivas según cada contexto.
A partir del año 2010 los emojis forman parte de Unicode, el sistema estándar de caracteres, lo que terminó por catapultar este lenguaje que hoy ofrece más de mil dibujos, los cuales se utilizan en todas las redes sociales y transcienden incluso lo digital, ya que se fabrican almohadas, llaveros, camisas, entre muchos otros productos.