El Mundial de Sudáfrica 2010 tuvo como protagonista fuera de la cancha al pulpo Paul, animal que se encargó de predecir y pronosticar los resultados de aquella competición que tuvo a la selección de España como la gran vencedora.
Los aciertos de Paul causaron gran sensación y provocaron que antes de iniciarse las competiciones más importantes del mundo del fútbol aparezcan una gran cantidad de animales que intentan seguir los pasos del famoso pulpo.
El Mundial de Rusia 2018 no será la excepción y será un gato llamado Aquiles, el encargado de pronosticar los resultados de algunos de los 64 partidos que se disputarán en esta competición, a disputarse entre el 14 de junio y el 15 de julio.
El felino habita en el Museo del Hermitage que está ubicado en la ciudad de San Petersburgo, localidad en donde se tiene previsto disputar un total de siete partidos. Aquiles, sufre de sordera y se hizo famoso el año pasado al acertar algunos de los resultados que se produjeron durante la edición de la Copa Confederaciones que se disputó en Rusia.
En esa oportunidad, Aquiles fue puesto a prueba para el partido inaugural que disputaron las selecciones de Rusia y Nueva Zelanda. Al gato se le colocaron dos recipientes con comida y con la bandera de ambos países, siendo el recipiente del equipo local el que escogió para comerse el alimento.
El pronóstico fue acertado, ya que la selección local se impuso por 2-0 ante la oceánica, con los goles de Michael Boxall y Fyodor Smolov. El resto de sus registros de aciertos no fueron tan altos en promedio en comparación a los que logró Paul; sin embargo, le bastaron para ser anunciado como el oráculo oficial de la competición más importante del fútbol.