El jueves 10 de julio, el Teatro Border de la Ciudad de Buenos Aires fue escenario de un show que reunió a dos referentes del humor en redes sociales: Romina Juarez, más conocida como Romi la radióloga de TikTok, y Solange Jesica Santander, alias Sol Santander.
Ambas llevaron sus exitosos unipersonales Simple y Sí Soy! a las tablas, en un encuentro que combinó risas, historias personales y una conexión directa con el público que ya las sigue a diario en redes.
¿Quién es Romi la radióloga?
Romina Juárez es radióloga de profesión, pero en el último año se convirtió en una figura viral en TikTok y en Instagram, con más de 1 millón de seguidores en las dos redes.
Su salto a la popularidad fue espontáneo: empezó mostrando su rutina en el hospital, con un enfoque humorístico y realista que contrastaba con los contenidos idealizados que dominaban su feed.
En Simple, su primer unipersonal, Romi lleva al escenario ese mismo espíritu: una mezcla de ironía, ternura, dolor y esperanza que interpela al espectador desde la risa y la empatía.
¿Quién es Sol Santander?
Por su parte, Sol Santander es creadora de contenido, profesora de danza y coreógrafa.
Su carrera artística comenzó mucho antes de volverse viral: daba clases de Zumba en un gimnasio, generando espacios de encuentro y movimiento.
Con la pandemia, volcó su energía a las redes, donde hoy supera los 2 millones de seguidores entre TikTok e Instagram.
En sus videos, Sol se destaca por su humor físico, su expresividad y su capacidad para transformar situaciones cotidianas en momentos desopilantes.
En Sí Soy!, su unipersonal teatral, repasa episodios de su infancia, su adolescencia y su transición a la adultez, todo atravesado por personajes entrañables y audios virales de WhatsApp que funcionan como parte de la puesta en escena.
Una noche compartida a pura risa
El jueves 10 de julio, Romi y Sol unieron fuerzas por primera vez en el Teatro Border para presentar sus shows en un formato compartido.
Cada una desplegó su unipersonal con un estilo propio, pero el espíritu del evento fue el mismo: reírse de una misma, compartir lo que duele sin solemnidad, y mostrar que el humor también puede sanar, acompañar y transformar.
Ambas creadoras construyeron comunidades sólidas en redes sociales, donde miles de personas encuentran alivio y complicidad en sus contenidos. Ahora, trasladaron ese vínculo al teatro, donde el cara a cara potencia todo lo que ya generaron a través de una pantalla.