La segunda temporada de los traumados y disfuncionales superhéroes de The Umbrella Academy, serie basada en el cómic de Gerard Way y Gabriel Bá, se estrena este viernes a través de Netflix con una tanda de diez episodios más entretenidos que los de su entrega inaugural de 2019.
Los nuevos capítulos de la serie creada por Steve Blackman parecen haberse propuesto desafiar aquel adagio que reza “segundas partes nunca fueron buenas”, y retoma la historia de los adoptivos hermanos Hargreeves con una dosis menor de melodrama y un mejor sentido de la acción y la aventura.
En un cada vez más abarrotado subgénero de series inspiradas en cómics, The Umbrella Academy se ubica en la esquina de cierto “revisionismo” del concepto de héroe.
Como Doom Patrol o la icónica Watchmen, a la que hace frecuentes referencias a modo de homenaje, esta serie presenta una colección de personajes que viven sus poderes menos como un don divino que como una maldición, que exhiben un compromiso muchas veces lábil con el prójimo y el bien público.
Poder teletransportarte en el tiempo y en el espacio, la súper fuerza, invocar espíritus luchadores o la telequinesis, entre otros dones, son entonces virtudes relativas en una existencia que la mayoría vive desde el nihilismo y la desidia.
Fuente: Télam.