CONFESIONARIO. Pete Burns y el jugador de basket Dennis Rodman, en un tete-a-tete en la Casa.
Gran Hermano 2007 arde, dicen. Y puede ser. Pero no tanto como el Celebrity Big Brohter inglés, un depósito de famosos en franca transición a ser "personajes bizarros", que buscan dar un manotazo frente a cámaras y rearmar su carrera. Actualmente en el aire, el Celebrity Big Brother tiene en Pete Burns a su jugador más osado. Algo así como todo lo que Gastón Trezeguet siempre quiso hacer y nunca se animó.
Para quienes hayan bailado al ritmo de Dead Or Alive, la banda de Pete Burns en los 80 (en hits como "You Spin Me Round"), es bueno aclarar que tiene un rostro nuevo: Pete Burns es un travesti. Y antes de entrar a la casa (en stilettos y tapado de piel... ¡aunque a Morrisey no le guste! ver recuadro-), se despidió con un "fuck you" a todo el público. "Me siento como si me hubieran disparado desde un cañón, siendo un hombre bala", dijo antes de entrar.
Pete Burns viene un poco maltrecho. Antes de entrar a la casa, su vida giraba en torno a la demanda que le inició a su cirujano plástico, Harley Street, por haberle "arruinado la carrera y la vida". Burns busca un millón de libras a cambio. Y todo por unos implantes en los labios que terminaron con el labio superior casi colgando. Todo este problema no es algo nuevo para Burns, que ya se hizo más de cien operaciones. Tan increíble es su tragedia, que Pete Burns incluso tiene un documental. ¡Que venga a la casa de Gran Hermano Argentina!