Tras el papelón del miércoles pasado, cuando Natacha Jaitt compareció ante en la Justicia por sus escandalosas acusaciones en la mesa de Mirtha Legrand, no presentó pruebas y huyó de Tribunales, un nuevo capítulo. Finalmente, el martes la mediática declaró durante cuatro horas en calidad de testigo en la causa judicial que investiga abusos a menores de las inferiores del club Independiente.
Según informó Clarín, Jaitt hizo referencia a casos de supuestos abusos de los que había tenido conocimiento, algunos de los cuales habrían sido cometidos por personas ya imputadas en la causa, que tiene cinco detenidos. Además, mencionó nombres que no habían aparecido aún y que la testigo asoció con los casos de abuso. La audiencia fue suspendida tras el pedido de la defensa de uno de los imputados y deberá ser completada en otra fecha a confirmar, durante la cual Jaitt continuará el interrogatorio.
Tras su declaración, el miércoles por la mañana la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) allanó su domicilio por orden del Juzgado Nº 2, a cargo del juez Ramos. La mediática se encontraba dentro de la casa junto a su hermano Ulises, quien recurrió a su cuenta de Twitter durante el procedimiento. “¡Otra vez allanamiento!”, escribió el joven. Según explicó el vocero de la PSA a Crónica TV, se secuestraron elementos electrónicos.