“Sí, quiero”, dijo Michael Bublé y así se casó con la conductora norteamericana Kelly Ripa, ante la mirada atónita de millones de personas, pero la mayor sorpresa se la llevaron los admiradores de Luisana Lopilato, quien está ultimando los detalles de su boda con el cantante canadiense para dentro de dos semanas.
Pero no hay por qué alarmarse ya que todo se trató de una broma. Michael fue invitado al ciclo norteamericano Live With Regis and Kelly de la cadena ABC, que se emite todas las mañanas desde un estudio ubicado en Times Square, New York. Allí Bublé ensayó para lo que sí será su boda real con Luisana el próximo 2 de abril en el Palacio Villa María de Máximo Paz, Ezeiza, Argentina. Igualmente, la pareja se volverá a casar el 31 de mayo en Vancouver, Canadá.
En este casamiento televisado, Kelly llevaba el velo y un ramo de flores para la ocasión, mientras que Michael lució un ramillete de flores en la solapa de su saco. Luego de aceptarse como marido y mujer, a través de unas paletas que tenían la inscripción de “I do” y “I don’t”, una lluvia de arroz invadió el estudio y brindaron con una botella que contenía sangre de tigre. Pero en una cosa estuvieron de acuerdo la conductora y el artista, ambos decidieron que no era obligatorio para la pareja consumar su matrimonio en su noche de bodas si los dos habían bebido demasiado. Y gracias a esa repuesta, recibieron un trago inspirado en Charlie Sheen.
Antes de la broma, Kelly entrevisto a Michael, quien contó detalles de su casamiento con Luisana: ."Estamos haciendo una boda en Argentina para que la familia de ella esté cerca, y también haremos una en Vancouver”, según detalló el diario britñanico Daily Mail.
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