La consagración cinematográfica de Silvia "Goldie" y Mirtha "Chiquita" Legrand data de 1941: ambas conquistaron a la audiencia (y a todos los productores que posaron sus ojos en este dúo deslumbrante) con Soñar no cuesta nada. A partir de ahí, a Mirtha la siguió un sinfín de proyectos, muchos de ellos en compañía de su talentosa gemela.
Claro de luna fue la última película que harían juntas en mucho tiempo y el retiro de Goldie ocurriría en 1972, en la película biográfica de Juan Manuel de Rosas, donde interpretó el rol de Mariquita Sánchez de Thompson. Luego, se dispuso a disfrutar de su vida familiar y su predilección por el bajo perfil, junto a sus hijas Gloria y Mónica.
Tras el fallecimiento de la adorada hermana de la diva de la tevé, las imágenes de Chiquita y Goldie en el set quedarán en lo mejor de los anales de la historia del cine de nuestro país.






Fotos: archivo Gente y capturas de cine.