La semana pasada Marcelo Araujo (73) fue internado de urgencia en el Hospital Italiano tras detectarle Covid-19 y su estado desde entonces es delicado. En este marco, el viernes las hijas del relator, Florencia Zilberman y Soledad Tuny Testi, se hicieron presentes en el departamento de Recoleta que su padre comparte con su esposa Graciela Guadalupe Ocampo e ingresaron a la fuerza con ayuda de un cerrajero.
El caso tomó estado público cuando una vecina observó estos movimientos y llamó a Ocampo, que se comunicó de inmediato al 911 por lo que acudió allí un patrullero. En paralelo, la esposa de Araujo se puso en contacto con su abogada, Mariana Gallego, y ella se acercó al lugar con su marido, Mauricio D´Alessandro tal como mostraron las imágenes viralizadas por el sitio Farándula Show.
La intervención de la pareja de abogados logró que la policía hiciera desalojar de la propiedad a Zilberman y Testi, una de las cuales había concurrido allí con su pareja y su bebé. “La fiscalía actuó correctamente para que, por supuesto, mi clienta tenga el derecho de retirar sus pertenencias. Recordemos que estaba fuera de la casa cuando esto pasó y su marido está internado con covid porque de hecho fue su esposa la que lo llevó en ambulancia hasta el Hospital después de un accidente doméstico y a partir de ahí se detectó que era positivo de coronavirus”, le dijo Mariana Gallego al mencionado sitio.
"Recordemos que estaba fuera de la casa cuando esto pasó y su marido está internado con covid"
De acuerdo a lo que explicó la letrada, las hijas de Araujo se niegan a reconocer el matrimonio que su padre contrajo con Ocampo en 2008 en los EE.UU., pese a que la Justicia argentina lo avaló, y explicó por qué ambas quisieron ingresar al mismo por la fuerza. “Es verdad que el departamento que ocupa la pareja es de una de las hijas porque fue una donación que le hizo el señor Araujo, pero hay un delito que es el de usurpación. Cuando una persona vive en una propiedad ni siquiera el propietario puede meterse a la fuerza, violentando el inmueble y por eso se le dio intervención a la fiscalía y se tomó esta decisión”, señaló Mariana.
“Estas chicas siempre se llevaron mal con mi clienta. Ella no desconoce la titularidad de ellas, está hace 19 años con él y creo que no se merece ser echada como un perro como intentaron hacer”, concluyó.