El 75° Festival Internacional de Cine de Venecia resultó ser el escenario ideal para consagrar a Lali Espósito (26) como actriz, tras desfilar por la alfombra roja junto a Leonardo Sbaraglia (48). Sonriente y espléndida, la artista deslumbró a las cámaras con su frescura y fue una de las grandes protagonistas de la jornada.
La trama de Acusada, el film de Gonzalo Tobal protagonizada por Lali y Sbaraglia, usa el crimen "como un disparador" para "explorar todo lo que hay socialmente a su alrededor". Película que se presentó hoy en la competición oficial de Venecia y compite por el León de Oro, el premio más codiciado del evento.
En el film, el director analizó cómo los medios cubren las informaciones de crímenes y la "fascinación social" que despiertan estos hechos. Y lo hace a través del caso de Dolores (Espósito), una joven de 21 años acusada de haber asesinado a su mejor amiga, Camila, dos años atrás. Así, Tobal se metió en el núcleo familiar, en cómo esa acusación ha transformado a sus padres (Sbaraglia e Inés Estevez), pero también a la joven, cuya vida y movimientos son seguidos de cerca por los medios de comunicación.
En ese planteamiento era importante que la interpretación de Lali no diera pistas claras, sino que jugara con la neutralidad, que fue precisamente lo más difícil para una actriz más acostumbrada a participar en comedias. "Gracias Gonzalo por ponerme en ese lugar de mucha búsqueda", dijo Lali. Es que ella trabajó junto al director en poner el "énfasis en la culpa", que puede venir de la culpabilidad pero también de otras cosas.
En la peli no se trata tanto de "entender si lo hizo o no lo hizo, sino de entender todo el sistema alrededor de un caso así: la familia, las relaciones humanas, los medios, las redes sociales", precisó la actriz. Para Lali, trabajar en todos esos elementos desde la ambigüedad fue lo más difícil, pero a la vez "muy interesante" y "placentero".
En diálogo con la prensa internacional, Lali Espósito comentó: "En la Argentina a la gente le importa más saber si tengo novio o novia que si maté a alguien, es un tipo de exposición muy fuerte; es interesante cómo se puede instalar la mentira sobre la vida de alguien famoso, pero también dónde esté parado uno frente a una mentira y cómo defenderla".
"Somos así, en los colegios, en los trabajos, hacemos comentarios del otro, sobre si alguien engañó a otro (...) Ni hablar cuando alguien es superpúblico y nos volvemos fanáticos de saber todo lo que vemos en los noticieros y en la televisión", agregó.
Una historia cuyo peso está enteramente en Lali Espósito, que reconoció que nunca antes había interpretado a alguien como Dólores, y nunca había tenido que ahondar tan profundamente en un personaje, lo que le obligó a trabajar desde meses antes para sacar otra cara de sí misma.
"En la Argentina están acostumbrados a verme en comedias", afirmó la artista. Por eso, ella se preparó mucho para esta actuación, hablando con psicólogos criminalistas o fiscales. "Eso me permitió encontrar esos picos emocionales y esos momentos de verdad que tiene Dolores", concluyó Lali Espósito.
Fuente: EFE.