Convertido en uno de los influencers más famosos de la Argentina y también en un comediante exitoso, Grego Rossello se hizo un nombre propio en las redes y en los medios. Sin embargo, el actor reveló en Vino para vos que no todo lo que brilla es oro en su vida y que hace poco más de un año debió recurrir a ayuda profesional para superar un estado depresivo.
“Yo a fines del 2019, y esto no lo conté nunca, la pasé muy mal. No pasó nada puntual, pero la pasé mal, no estaba bien yo”, le explicó Grego a Tomás Dente. “Me veía desganado, tuve un accidente de auto en el que me pegué un susto bárbaro. Mi psicóloga me pidió aumentar las sesiones y estuve yendo seis meses al psiquiatra”, explicó.
Para explicar las causas de este tratamiento, Grego contó que “no entendía la magnitud de lo que te puede jugar para atrás el bocho aunque estés bien”. “Yo estaba triste y no sabía por qué y me partía”, dijo en referencia a que este estado lo agarró en su momento de mayor éxito.
“Yo hice cuatro años de shows a la gorra donde no llegaba a juntar 3500 pesos para ver si me podía mudar solo. (…) Y cinco años después trabajaba de lo que me gustaba, tenía el auto y el departamento que yo quería, pero igual había algo”, señaló el actor, antes de explicar que durante los siguiente cuatro o cinco meses “lo ayudó un psiquiatra”. “Nunca lo conté porque me daba vergüenza. Es más, cuando la psicóloga me lo recomendó, me enojé porque pensé que creía que estaba loco”, recordó.
“Fui cuatro meses con un muchacho que es un crack. Tenía miedo que me medicaran, pero no llegó a eso, aunque hoy creo que no hubiera tenido drama”, dijo Rossello, y trató de clarificarle el camino a aquellos que están en su misma situación. “Creo que tenemos un orgullo puesto en darle valor a la salud emocional: al gimnasio vamos, abdominales y bronceado hay que tener, seguidores hay que tener”, concluyó.