Si bien los actores están acostumbrados a adaptarse a lo que la escena requiera, algunas tomas son difíciles de encarar... sobre todo, por el momento en que las imágenes salen al aire y lan ven los familiares.
Algo así le pasó a Manuela Pal (32) quien, tras mostrarse con una sensual y pequeñísima tanga roja en Amar después de amar (Telefe), la joven tuvo un divertido chat con su suegra... ¡y luego lo compartió en Instagram!
Mientras la madre de su pareja le preguntaba por dos detalles del capítulo, la actriz fue directo al grano: "¿Me viste en tanga? Jajajaja, decime que mi suegro no", le escribió a la mamá de Gonzalo Díaz Servidio, con quien la actriz tiene a su pequeña hija Amparo (1).
Tras las repercusiones, Pal se refirió al tema: "Por suerte (mi suegro) no me vio, se quedó dormido. Igual para mí le pasa lo mismo que a mi papá: cuando hago esas escenas, o las de sexo o de violencia, directamente no me ven", contó Pal en diálogo con Clarín.
"Para mi fue un papelón, me dio mucha vergüenza, tenía otro cuerpo en ese momento... acababa de ser madre, tuve a Amparo en diciembre de 2016 y arrancamos a grabar en mayo. Se me estaba acomodando el cuerpo, estaba súper tetona, Me veo distinta, mis amigas me dicen que no soy yo. El otro día salió una escena en la cama y no me veía sexy, me sentía una vaca lechera, no por gorda sino porque en ese momento daba la teta cada tres horas", agregó.
"El físico, para mí, nunca fue algo traumático. Si el personaje hubiera sido más jugado me hubiera esforzado para llegar mejor. En todas las novelas tuve escenas de sexo y mis compañeros siempre me cuidaron, pero en esta me sentía como un pochoclo sin forma, no podía hacerme la sexy con esa tanga roja. Lo bueno es que fue eso solo y no un video. No soy fanática de lo físico, por suerte tengo un cuerpo naturalmente armonioso", cerró Manuela Pal.
¿Su suegro verá Ciudad.com? Ups...