Desde que a su querido -y tan deseado- hijo, Antonio, le diagnosticaron un trastorno del espectro autista, María Julia Oliván se puso como objetivo luchar con valentía para que el niño disfrute de una cotidianidad feliz y similar a la de sus pares.
Desde muy temprana edad, la periodista está pendiente constantemente de su pequeño y, a través de la red, celebra cada pasito que da junto a ella. En el Día del Niño, María Julia aprovechó la oportunidad para destacar la lucha de su hijo y, principalmente, su forma de ser.
"Nuestro amor no sabe de apuros ni se toma vacaciones, porque se nutre de abrazos y besos. Está fresco como una lechuga. Se alimenta también del acompañamiento en las muchas luchas diarias que emprendimos en estos tres años", comenzó diciendo.
"Sos mi campeón, te admiro y respeto. Estoy segura de que un día de estos vamos a darnos la gran charla que, de momento, se lee en caricias y miradas".
Y siguió: "Me enseñaste a trabajar más, pero empujando menos. Me mostraste que tenía adentro más fuerza que la que pensé y me sorprendiste sacando de mí una paciencia totalmente desconocida. Nuestro amor me salvó para siempre de sentir alguna soledad. Con vos, hijito mío, la felicidad más plena está en una habitación llena de cuentos y un colchón para saltar, leer y jugar a quien mira más grande".
Conmovida, la periodista cerró con su tierno mensaje destacando la personalidad de su primogénito. "Sos mi campeón, te admiro y respeto. Estoy segura de que un día de estos vamos a darnos la gran charla que, de momento, se lee en caricias y miradas".