El problema de Gladys la Bomba Tucumana con el personal de vestuario de Cantando 2020 salió a la luz de una forma explosiva: la cantante no solo lloró y amenazó con renunciar al certamen, por sentirse incómoda con las prendas que le confeccionan, sino que tuvo una repudiable expresión al respecto, en un material que mostraron en LAM. "Esto es de una villera boliviana", dijo, sobre el vestido de la discordia.
Compungida por el hostil clima que vive con las vestuaristas de Laflia y por la ola de críticas que recibió por su descargo discriminatorio, la Bomba habló con Nosotros a la Mañana del conflicto y no disimuló su bronca: "No entienden que yo no quiero entrar en ninguna. Lo de vestuario sí, sucedió, porque ya es algo muy alevoso lo que está pasando conmigo en vestuario. Yo veo pasar cada vestido que vos te caes de orto, si los llegás a ver, y nunca son para mí esos vestidos".
"Yo veo pasar cada vestido que vos te caes de orto, si los llegás a ver, y nunca son para mí".
Lejos de dejar pasar las críticas de Gladys la Bomba Tucumana sobre el trato y el trabajo que recibe de parte de las modistas del Cantando, la jefa de vestuario, Lana Ferrando, declaró en LAM: "Yo no tengo ningún rollo con el tema de los cuerpos. Eso es algo que ella no tiene resuelto en su propia mirada de sí misma. Por eso tiene conflictos… Además, anda diciendo que las demás tienen telas importadas y no sé de dónde lo sacó. La mayoría de las telas son importadas de China y otras se fabrican acá. Uno de sus vestidos tenía una tela que vale más de 4 mil pesos el metro".