La versatilidad de Benjamín Vicuña (36) para la actuación es casi tan plástica como su propio cuerpo para interpretar a los personajes que le tocan, y eso además se traduce en la adaptación familiar. De regreso a Buenos Aires junto a su mujer, Carolina "Pampita" Ardohain (37), y sus hijos, Bautista (7), Beltrán (2) y Benicio (7 meses), el galán chileno se prepara para el debut deEntre Caníbales.
Aunque antes de que Vicuña se aboque a la tira que estelarizará junto a Natalia Oreiro yJoaquín Furriel, bajo la dirección de Juan José Campanella por Telefe, trabajó para Fox+ enSitiados, la ficción ambientada en el siglo XVI. "Aumenté seis kilos y tuve que entrenar. Fue un trabajo excelente, de época y de alta calidad. El diseño, el arte, el maquillaje, el vestuario. Pocas producciones se han animado a contar una historia de ese estilo en mi país y por eso fue hecho con una prolijidad absoluta , respetando todos los detalles", aseguró Vicuña, en una entrevista para la revista Luz.
Obvio que tanto para Pampita como para Benjamín Vicuña la familia es una prioridad absoluta: "Trato de ser lo mejor padre posible. Creo que es algo que hay que hacer como a cada uno le nace. Su mamá y yo tenemos trabajos que nos obligan a viajar o a tener horarios complicados, pero siempre estamos presentes. Si nos tenemos que trasladar, vamos todos juntos. En este caso, cuando grabé Sitiados, Carolina y los chicos nos acompañaron al sur de Chile. En definitiva, de eso se trata ser padres".