Alberto Cormillot (73) volvió a Cuestión de Peso tras enfrentar una operación de cáncer de colon que lo tuvo dos meses fuera de actividad. Ni bien entró al estudio, sus compañeros lo llenaron de aplausos y él habló con Claribel Medina sobre cómo superó la enfermedad.
"Al principio pensé en lo peor. No en la operación, en eso yo estaba seguro de que salía bien".
“Empecé a sentirme flojo y me decían que era porque trabajaba mucho, pero yo notaba que había algo que no andaba bien. Pedí análisis de marcadores de cáncer y uno de esos salió positivo”, contó el doctor.
Sobre la operación afirmó que le habían sustraído medio "metro de intestino" y que afortunadamente no debió hacer quimioterapia, lo que le hubiese impedido bailar, una de sus pasiones. Consultado sobre los dolores que padeció, Cormillot declaró: “Lo que más me dolió fue la falta de energía. Me producía dolor moral, espiritual”.
"Lo que más me dolió fue la falta de energía. Me producía dolor moral, espiritual".
Pero el doctor se convirtió en buen paciente e hizo todo lo posible para recuperarse rápido. “Yo tenía que subir seis kilos y los subí en tres semanas, y tenía que fortalecer los músculos e hice todos los ejercicios que me dijeron”, contó, y dio un mensaje de fuerza: “Ni bien me enteré, me puse en modo operativo. Sentí que tenía que resolver el problema”.
Luego declaró: "Al principio pensé en lo peor. No en la operación, en eso yo estaba seguro de que salía bien". Sobre los síntomas, el doctor contó que sus respuestas eran menos rápidas, y que tenía olvidos y distracciones. "Consideré que podía ser Alzheimer o un cáncer. Y se dio un cáncer".
Cuando trascendió su operación, Ciudad.com se había comunicado con él para chequear el motivo de la intervención, pero en ese momento el doctor prefirió mantenerlo en privado, afirmando que sólo había sido "por unos divertículos".
Hoy, afortunadamente, se encuentra en muy buen estado. Según contó, ya baila más de una hora y el espectáculo de tap del que formará parte se llamará Disfrutap. "Disfrutá hoy, porque mañana puede ser tarde", afirmó Cormillot a modo de conclusión, todo un mensaje de alguien que salió adelante de una parada brava.