A más de un mes de su internación en una clínica psiquiátrica (cuyo motivo no acabó de trascender a pedido de su familia), el hermetismo sigue siendo absoluto. La actriz, que está bajo cuidados especiales en centro ubicado en la zona norte del Gran Buenos Aires, sigue un estricto tratamiento. Por este motivo, todo indicaría que será imposible su incorporación a El Lobo, la nueva novela de Pol-ka, cuyas graciones arrancan en diciembre.
Sin embargo, no todo es tan malo para Celeste. Este domingo, por caso, la actriz tuvo una de sus primeras salidas del centro de rehabilitación y pasó una jornada en familia.
Según publica el diario Muy, Celeste fue hasta su casa de Colegiales junto a su hijo, André, su padre, Aníbal, y su hermano Sebastián. Allí los recibió una amiga íntima de la actriz y juntos disfrutaron de un almuerzo de reencuentro.
Alrededor de las seis de la tarde, Celeste se subió al auto de su hermano con su hijo de 7 años y se dirigió hasta la casa de Emmanuel Horvilleur, su ex pareja y padre de la criatura. Finalmente, la actriz se saludó muy afectuosamente con el cantante y le dio un gran beso de despedida a su hijo.
¿Cómo se la vio a Cid? Algo más delgada, cierta tristeza en su mirada, pero una expresión de completa calma en su rostro perfecto. Luego, siguió camino hacia donde pasa sus noches, en pos de una recuperación total. Una lucha que entabla día a día.
¡Fuerza, Celeste!