"Escogimos este día porque significa longevidad , es un número muy significativo y afortunado", explicó a Efe Li Qing, un ingeniero de software que hoy contrajo matrimonio en el distrito pequinés de Dongcheng con su novia de hace un año, la enfermera Liu Kun.
La pareja, que muestra feliz su libro de familia ante los fotógrafos de boda a la salida del registro, dice que se conoció en una pizzería con otros amigos. "Esperamos que con esta fecha afortunada se prolongue nuestro amor", afirma ella.
El número nueve, "jiu", se pronuncia en mandarín de forma similar al ideograma "longevidad", por lo que tener tres nueves en la fecha de boda augura, según la tradición local, un largo matrimonio.
Otra tradición indica que el nueve es el mayor de los números de un solo dígito y por ello se asocia con el Emperador, lo que para algunos añade un toque aristocrático al día del casorio.
En China, estado aconfesional, la boda se formaliza ante la ventanilla del Registro Civil, que emite el certificado matrimonial, y días o incluso meses después, según la situación económica de la pareja, los recién casados se atavian con los trajes de boda, se fotografían y celebran el banquete con familiares y amigos.
A pesar de que los miércoles no suele ser un día muy concurrido para casarse, el de hoy es especial por ser el del "triple nueve".
Sólo en Pekín se calcula que se batirá un récord de más de 10.000 bodas, según señaló hoy a Efe Zhao Hongcun, subdirector de la Administración de Asuntos Civiles de Dongcheng, con lo que se espera superar el récord del 8/8/08, una fecha propicia para la fortuna.
El número ocho, "ba" en mandarín, se pronuncia parecido a "enriquecerse", por lo que, de forma significativa, fue escogida también por las autoridades chinas para la inauguración de los Juegos Olímpicos de Pekín.
La administración en la que trabaja Zhao ha tenido que alquilar y habilitar la cancha de básquet de 600 metros cuadrados del vecindario de Dongsi para ubicar a 1.200 parejas que se registraron para casarse hoy en el distrito, uno de los ocho de la capital china, ciudad en la que residen unos 17 millones.
"Hasta hoy recibimos 1.200 solicitudes de matrimonio para este día, y hasta esta hora (11.00 hora local) unas 500 parejas se han personado para finalizar los trámites", explica el funcionario Zhao.
Su administración ha tenido que preparar una logística especial para el día de hoy: las parejas entran por la puerta posterior del gimnasio, donde se les toma la temperatura en virtud de las normativas para prevenir la gripe A, y luego acceden a la cancha, donde por lo menos diez funcionarios se ocupan de la burocracia.
A la salida les esperan unos fotógrafos que les cuelgan dos letreros en los que puede leerse "09/09/09" y "¡Nos hemos casado!".
Se trata del último grito en invitaciones de boda, ya que las fotos se revelan en la puerta del Registro Civil, y convertidas en postal son enviadas como invitación a través del servicio de correos, también instalado hoy en la puerta.
Aunque todavía se desconoce la cifra total de bodas que se producirán hoy en China, los registros provinciales indican que es muy probable que se marque un nuevo récord, y hoteles y restaurantes están ofreciendo precios especiales para esta fecha.
En la ciudad de Guangzhou (capital de Cantón, sur) se han registrado 6.106 parejas; en Shanghai (este) 5.000; en Tianjin, al este de Pekín, 4.000; y en Xian (capital de Shaanxi, centro) se esperan más de 1.000, según datos de la agencia de noticias Xinhua.