A sólo unos días de haber comenzado el juicio por la tragedia de Cromañón, el principal implicado en la causa, brindó declaraciones exclusivas a Ronnie Arias, para Mañanas Informales. En su defensa, Chabán sostuvo la teoría de que "lo que sucedió fue un delirio de tres tipos y no un problema de habilitación" y que la gente se dio cuenta de lo que estaba pasando porque fue él el que bajó el sonido al notar el fuego.
Entre otras cuestiones, dijo que su boliche "era uno de los 10 lugares más seguros de Buenos Aires" y aceptó que en el lugar "había salidas de emergencia" y que la puerta de la que todos hablan "no era una puerta que daba a un hotel que estaba inhabilitada porque está prohibido que una discoteca tenga conexión con otro espacio".
El empresario, autoproclamado paranoico y obsesivo, expresó su temor de volver a la cárcel y se negó a hablar sobre Callejeros, la banda también implicada, ya que todavía no prestó testimonio ante el juez. Después de la nota, Ronnie, que se lució nuevamente en su papel de entrevistador "amigable", contó que Chabán vive casi "como un muerto en vida".
O por lo menos, es la impresión que intenta dar.