En el club River Plate estarían pensando en tomar una decisión definitiva con respecto a la continuidad de Ariel Ortega. Y es que el "Burrito" le pidió a Astrada no jugar el último partido y los rumores de una nueva recaída volvieron a tomar estado público.
La teoría más sostenida indica que el delantero se habría peleado con su mujer y ese motivo lo habría llevado a caer en una gran depresión. Esa discusión sumada a su alcoholismo hicieron que "el Burro" no pueda participar del partido.
"Ariel es conciente de lo mal que jugó el clásico y eso lo tiene muy mal, ese partido no hizo más que agudizar su recaída", dijo un allegado que se refirió al mal rendimiento de Ortega en el partido contra Boca.
No es la primera vez que el jugador transita esta situación: desde siempre los conflictos familiares y sus borracheras en boliches han dado que hablar. ."El problema más grande de Ariel es que no entiende que la enfermedad que tiene lo va a acompañar por el resto de su vida. Él sigue repitiendo que puede controlar su adicción y por eso no se quiere internar", concluyó una voz amiga.