Ante unas 15 mil personas que anoche colmaron la explanada del Estadio Monumental de Lima, en Perú, Charly García volvió a los escenarios después de 15 meses, con un concierto impecable. De elegante sport, y con una imponente puesta, a cargo de Pichón Baldiniu, y recibido por el público con una ovación, García arremetió con El amor espera. Con una voz recuperada, lejos de los desacoples de tiempos no muy lejanos, apoyado en la solidez instrumental ofrecida por la banda formada por Zorrito Quintiero, el Negro García López, Hilda Lizarazu y el trío chileno The Prostitution (Kiuge Hayashida, Toño Silva Peña y Carlos Ludwig González), Charly siguió con el Rap del Exilio, para continuar con una notable versión de No soy un extraño, caminata por todo el escenario incluida.
Apenas un "buenas noches" como separador, y más música. Mucha música. Dos horas durante las cuales un García de excelente humor recorrió toda su carrera solista. Promesas sobre el bidet, Canción de 2 x 3, Influencia, Vicio, Pasajera en trance, Chipi Chipi y Raros peinados nuevos fueron algunos de los 27 temas de la lista, que incluyó una visita a la etapa Serú Girán, con Llorando en el espejo.
La presencia de García en Lima fue seguida con atención y enorme expectativa por sus fans y los medios locales, "Con verlo parado nuevamente sobre el escenario me alcanza", alguien dijo entre la multitud. Charly entregó mucho más que eso.
